Mi llegada a la Acuarela

MI LLEGADA A LA ACUARELA
Mi llegada a la Acuarela fue como si en algún momento me hubiese bajado de un tren y la hubiese encontrado allí de pronto. Nuestro encuentro tuvo mucho de casual. Desde entonces creo que existe la buena suerte. Los astros debieron alinearse ese día en el que decidí apuntarme en uno de esos Encuentros que organiza la Agrupación de Acuarelistas de Andalucía. Sin saber como me ví en medio de una Plaza pintando. Sintiendo cada soplo de aire a mi alrededor como si fuese un sólido y oyendo lejanos ruidos de gentes al pasar. El agua en mi cuadro parecía estar viva. Las cosas allí cambiaban a su gusto sin control. Acostumbrado a la inmobilidad del oleo, llegué a hablar en voz alta a pesar de estar solo. Mi concertación era el producto de un sin fin de pensamientos a los que no podía poner freno. Estaba entonces viajando en ese imaginario tren que iba a toda velocidad y sin freno. Al final, me fui rindiendo a la evidencia. Mi primera Acuarela como obra pictórica era catastrófica. Conforme aceptaba esta realidad, el tren se fue parando hasta llegar a una estación llamada LA ACUARELA. Al bajar, una vez en el andén pude leer un rótulo que alertaba: A partir de ahora, pintar un cuadro no será un acto placentero y relajante sino todo lo contrario. Una lucha con elementos cambiantes y un apasionante viaje a tu interior.
... y aquí sigo, desde entonces, atado a ese viaje...
Luis Lomelino. Acuarelista.

DEMOSTRACIÓN DE PINTURA A LA ACUARELA



INTERPRETACION A LA ACUARELA DE LAS MENINAS


 Resulta difícil interpretar la obra de un artista genial en cualquier caso, pero en el caso de Velazquez, las complicaciones se acrecientan. 
Pese a que la técnica de la Acuarela es muy versátil y puede adaptarse a cualquier temática y lenguaje, se trata de una idea que se adapta mejor a las técnicas opacas como el oleo. El tamaño de la obra original en la que se magnifican  los blanco luminosos del primer término y sobre todo la creación de espacio en diversos planos.


Empiezo con unos planos de color gris muy transparentes y reservando los blancos desde el principio. También el encuadre es especial dejando solo recortadas algunas figuras que en el cuadro original son importantes.




 La Acuarela, tiene la virtud de la síntesis de tal manera que desde el principio se ve bastante bien cual es la intención de la pintura.







 Añadiendo un poco de saturación al fondo y algunos detalles.




1 comentario:

Mercedes Peña dijo...

Muy bueno, Luis, me encanta.
Besos